miércoles, 23 de enero de 2013

Una Educación Privada

Tercera clase de exposiciones

En la mayoría de las conciencias de las personas se sitúa la idea de que los centros privados son más estrictos y por ello suelen ser considerados como grandes competentes en la educación de los hijos. Hay mujeres que piensan que en los centros públicos sus hijos serán mal influenciados.
Todos estos pensamientos son simples estereotipos que se han formado, bien durante la interacción de opiniones o bien por alguna mala experiencia atribuyéndoles esa buena o mala experiencia a la generalidad como las situaciones que padecerán todos los niños que asistan a ese determinado centro. Si es privado, todos los privados serán así, y si es público, igual.
No todos los individuos están capacitados o educados para pensar en que no se debe realizar atribuciones generales, y su conciencia les incita a pensar de acuerdo a sus experiencias.

Mi propia experiencia en un colegio privado fue agradable en base a unos aspectos y desagradable en cuanto a otros. Para empezar, como ya comenté en otra entrada de este blog, la experiencia que tuve con los profesores al no querer que cogiera el bachillerato de ciencias y las posteriores calificaciones en la misma al cambiarme de centro que fueron sorprendentes, tuvieron lugar en el colegio privado del que hablaré. Con esto no quiero decir que todos los colegios privado sean bajo el estereotipo de manipuladores, o como contaré a continuación, de "niños ricos" y de favoritismos hacia su imagen y algunos alumnos "hijos de".
En primer lugar, mi aprendizaje no es que fuera de los mejores, en la asignatura de inglés sinceramente no aprendí nada, y con esto quiero decir prácticamente casi nada. Todo el inglés que ahora mismo conozco me lo enseñó la profesora que tuve en el posterior colegio en el que me matriculé durante primero y segundo de bachillerato. Una profesora excelente con un método realmente bueno.
También tengo que decir que en mi estancia en el centro privado, los conocimientos que adquirí de biología y la ilusión que inculcaba la profesora que daba la asignatura, me hicieron desear en segundo lugar, el estudiar esta carrera en la universidad.
En cuanto a las notas de cada evaluación final, varios de mis compañeros y yo, por el entendimiento que teníamos de los conocimientos de unas personas "hijos de" y por su actuación durante el curso, llegamos a la conclusión sin lugar a dudas, de que hubo favoritismo en cuanto a varias notas que veías superiores a las tuyas habiendo realizado a mi parecer casi el doble de trabajo y esfuerzo.
En segundo lugar, en el ámbito social en el trato con los compañeros, se podían diferenciar varios grupos que concretaré en dos: los "más pijos" y los "menos pijos". Aunque he de decir, que había alumnos en el grupo de los más pijos con casas que no eran ni la mínima parte de uno de los menos pijos  (con esto me refiero a en cuanto al tamaño y el lujo).
Tras esto último saqué la conclusión de que había alumnos con carencias de autoestima y de falta de afirmación del yo, que debían satisfacer perteneciendo al grupo de los más pijos, que como apuntaré en la entrada de "La Moda" : las clases inferiores suelen imitar las modas de las clases superiores. Esto no implica que los ricos tengan que estar con los ricos. A simple vista se veía quién era el líder del grupo (los que más dinero tenían).
Claro está que para pertenecer a este colegio hace falta una cantidad de dinero que no poseen las clases bajas pero si las clases medias o medias-altas, en este ejemplo, con clases inferiores me refiero a éstas últimas y con las superiores a clases altas y ricas.
En cuanto al grupo de los menos pijos, y aunque me llevaba en general bien con todos mis compañeros, me veía más integrada y cómoda en este grupo que en el otro, tal vez por sus diferentes temas de conversación, porque no criticaban a todo lo que se movía por delante de sus ojos, o simplemente porque eran más afines con mi forma de ser.
No quiero decir con la narración de mi experiencia que todos los colegios privados sean de ésta determinada manera, sólo lo cuento como una experiencia a compartir que es interesante de conocer y con la que podéis llegar a vuestras propias conclusiones.

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